Como ya os he contado anteriormente, los viernes, al finalizar la asamblea, el encargado de ese día, coge uno de los papelitos que hay dentro de Pepín, y así lo hizo Ana el viernes que fue encargada:
Los peques se ponen muy nerviosos y quieren averiguar cuanto antes que nombre es el que hay escrito en el papel... Para que lo adivinen les doy una serie de pistas, pero lo primero que me preguntan es que si es el nombre de un niño o una niña.
Las pistas de ese día eran: es un nombre de niño, tiene dos palmadas, comienza por la M y acaba por N; y el nombre que había escrito en el papel era el de Martín, que se puso muy contento cuando adivinó que el nombre que había escrito en el papel era el suyo...
El martes siguiente, que es cuando Martín tenía que traer el libro, vino muy contento, deseando enseñar y contar al resto de la clase cuál había sido su trabajo en el libro. La imagen que le tocó a Martín tenía cuatro manzanas rojas y una manzana amarilla. Así es como él la interpretó:
¡Fantástico trabajo el que hizo Martín! Nos contó que su papá y su mamá le ayudaron y, por ello, les queremos dar las gracias, por haber colaborado en la realización de otra página de nuestro Libro Viajero.
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