He comentado en entradas anteriores que a los "peques" de mi clase les encanta cumplir años... Así, el pasado martes 24 de enero, Darío venía muy contento al colegio ya que ese día era su cumpleaños ¡cumplía 5 años! ¡Estaba deseando celebrarlo en el colegio invitando a desayunar a sus amigos y amigas de la clase!
Cuando entramos en clase, se encargó de recordarme que era su cumpleaños y se colocó enseguida en la cabeza la corona, que ya estaba preparada. Con ella puesta, escuchó muy guapo, contento y sonriente como le cantábamos "Cumpleaños Feliz" y le dábamos un sonoro aplauso...
Cuando llegó la hora del desayuno, la mamá de Darío llevó batidos de chocolate y churros para todos. ¡Como nos gustan los churros! ¡Qué montón de churros había! ¡Como nos pusimos! Estaban... ¡deliciosos! Mmmmmm...
¡Muchas felicidades, Darío! ¡Gracias por el desayuno tan rico! ¡Qué cumplas muchos más!
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