Alonso contó a los peques el cuento de Ricitos de Oro y los tres ositos y así ayudaron al Hada Cuentina a recordarlo, porque , como ya dije en una entrada anterior, se le habían olvidado todos los cuentos...
Los peques escucharon muy atentos el cuento, pegaron el dibujo en el mapa de Cuentina y realizaron las actividades que Alonso les había preparado. Pero Alonso les tenía preparada una sorpresa más: ¡iban a jugar al bingo!
Para ello preparó unas hojas con imágenes del cuento, hojas como estas:
Por equipos, y con la ayuda de Clara, hicieron girar en el ordenador una ruleta con los dibujos del cuento, tenían que tapar con un tapón de colores el dibujo que saliera en la ruleta:
¡Había que estar muy atento! La flecha señalaba un dibujo y había que mirar a ver si estaba en nuestra hoja. Si estaba el dibujo, había que taparlo con un tapón de colores. Ganaba el que tapara antes todos los dibujos de su hoja.
¡Qué bien se lo pasaron los peques!:
Fue una actividad novedosa y motivadora, no todos podían ganar, unos ganaron y otros no, pero no les importó, acabaron todos muy contentos porque se lo pasaron ¡fenomenal! y eso... es lo principal.
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