DÍA DE LA MADRE

El primer domingo de mayo se celebraba el Día de la Madre y en el cole hemos estado preparando el regalo para cada una de las mamás de la clase...

Para que el regalo quedara lo mejor posible, había que hacerlo de uno en uno: pintar la flor por los dos lados, pintar la hoja, pegar los corazones en la botella... Y estaban impacientes por hacer cada uno el suyo.

Durante todos los días que duró la confección del regalo, aprendieron la siguiente poesía:

Tengo una mamá divina,

la quiero requetemucho,

parece un hada madrina,

con varita y cucurucho...

Sus caricias son de miel,

sus besos, de caramelo,

su risa es un cascabel,

que me hace tocar el cielo.

Y si me duele la tripa,

me arrulla y me cuenta un cuento,

con el que lo paso pipa,

¡no hay mejor medicamento!

En este día importante,

yo le quiero regalar,

un abrazo de gigante,

¡Te quiero mucho, mamá!

Había que hacer una tarjeta en la que iban a dibujar a su mamá, y ¡rotulador en mano!, se pusieron a hacer cada uno su dibujo:

Dibujaron unas mamás simpáticas, tiernas, graciosas, cariñosas y elegantes ya que la mayoría las dibujó con zapatos de tacón...

Una vez que  las tarjetas estuvieron terminadas y todos los regalos acabados y envueltos, querían llevárselos a casa, pero había que esperar porque hasta el viernes no se los podían llevar, y estoy segura que ninguno esperó al domingo a dárselo a mamá, aunque quizá me equivoco... 

Aunque ya ha pasado el Día de la Madre, no quiero finalizar esta entrada sin felicitar a todas las mamás de la clase. ¡Felicidades, mamás!

Aquí os dejo el vídeo que he creado con todas las fotos tomadas durante los días que duró la actividad. Espero que os guste...