Como cada viernes, el pasado 29 de noviembre, al poco de entrar, mis peques se acordaron del día que era y que en ese día alguien se iba a llevar a nuestra mascota a casa...
Estaban deseando quien era la persona afortunada que pasaría todo el fin de semana con Pelusa, pero para eso la encargada tenía que sacar un papelito de la tripa de Pepin.
Irene Martínez era la que sacaría el papel y... ¿quién se llevaría a la brujita?
Irene escribió el nombre en la pizarra y algunos niños y niñas lo reconocieron, Nazaret levantó la mano cuando vio que el nombre escrito era el suyo; ¡qué contenta se puso! ¡Era la que se llevaría a Pelusa a su casa!
Al lunes siguiente, Nazaret no pudo venir al colegio porque estaba malita, pero el martes, ya recuperada, vino y pudimos saber todo lo que había hecho con Pelusa durante todo el fin de semana: fueron a pasear, vieron la pista de hielo y jugaron en el parque donde se lo debieron pasar muy bien, fueron a casa de la abuela, salieron de paseo con los abuelos, tíos y primos, jugaron en casa y vieron la tele... Nazaret también ha podido dormir con Pelusa. ¡Que fin de semana tan divertido!
¡Muchas gracias a Nazaret y a su familia por haber acogido durante el fin de semana a Pelusa y haber participado en el Libro Viajero!
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